El ridículo cambio.

Cada vez que te miro me pongo a pensar; ¿Por qué?
¿Se puede saber por que has cambiado ?
Antes nos solíamos llevar bien.
Ahora tu única prioridad cada mañana es buscarte una mini falda, ponerte unos taconazos, hacerte un super-moño y pintarte una ralla larguísima en los ojos.
Me da pena porque antes eras un chica inteligente pero ahora te pones nerviosa con la pregunta de ¿De que color es el caballo blanco de Santiago?
Pero en cierto modo me hace gracia porque es ridícula la imitación de "super barbie girl" en la que te has convertido, y sin ayuda de nadie, algo que has conseguido tu solita, te felicito.